En la aurora del día, una dama canta,
Versos tejidos, melodías que encantan.
Escribe canciones al nuevo sol brillante,
A la naturaleza, generosa y radiante.
En cada estación, su pluma se desliza,
Canta al verano, al invierno, a la brisa.
Agradece al Cielo por el don divino,
De sentir amor en cada camino.
La vida le brinda un lienzo de colores,
Con el arte en su alma, sin temores.
A Dios agradece con humilde devoción,
Por el regalo del arte y la canción.
Con talento compone, su corazón palpita,
Cada nota es un suspiro que invita.
Amar la vida, agradecer el don,
Cantando al amor, siempre en canción.
Joaquín Lourido D.R.A.
Pero qué maravilla de cadencia. Me ha encantado, ganas me dan de grabar tu poema, es bellísimo.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte, Joaquín
Hola Mari Pau tienes todo el permiso del mundo si lo deseas grabar. Gracias por saber estar y ser. Un abrazo y buenas noches.
EliminarEs de las pocas cosas que hay a las que se le deba cantar.
ResponderEliminarBesos
Totalmente de acuerdo Tracy.
EliminarUn fuerte abrazo amiga.
Siempre cantar al amor.
ResponderEliminarMe encantó!
Un abrazo.
Gracias Sara por tu apoyo.
EliminarUn abrazo y feliz fin de semana.