Amanece más temprano,
pero hoy no madrugué
debe ser que el dormir pensando en ti
hace que mi alma descanse
aún sin cerrar mis ojos.
Debe ser que estoy volviendo a sentir...
Y tengo miedo.
Perderme en tus ojos,
es ahogarme en los mares más profundos...
y contemplar el alba de tu sonrisa
es subir montañas sin escalar.
Misterioso destino tu vida, la mía...
era de Dios que debían unirse.
Quizá espere por ti,
quizá no te vuelva a sentir.
Solo sé que hoy te siento,
que formas parte de mi
y que si lograras meterte
por cada uno de mis poros…
ahí sí!!! moriría por ti.
Descúbreme, explora cada rincón de mi cuerpo,
dibuja nuevas emociones en mi piel,
llévate la dulzura de este amor
y borra secuelas de dolor...
no me dejes ir...
si ya no puedo ver, mira por mí.
Si no se hablarte, siente mi latir.
Esta distancia
une la desesperación de volver amar…
De poder querer con locura,
con la locura que cada uno sabe querer...
de ser niños otra vez,
de que no te importe ya nada de nada,
de creer en la ilusión y que cada sueño
ya no sea un sueño,
y en esta realidad se refleje...
Juguemos a que me vas a amar y que yo te adoraré.
Juguemos a que seremos felices;
a que te seré fiel...
Juguemos a que me harás sentir
lo que ninguna mujer me hizo sentir
Y que yo seré el hombre que navegue como céfiro velero
los lugares más secretos de tu piel.
¿Y si deja de ser un juego?
Joaquín Lourido
Quino© 2022
Derechos Reservados.
Bonitos versos, Joaquín.
ResponderEliminarUn abrazo.
Gracias Chema por tus palabras. Siempre ere bienvenido.
EliminarUn fuerte abrazo y feliz semana.
Un sentir enamorado. Perder lo que se ama puede ser un motivo de ansiedad. Pero lo ideal es gozar del hoy, sin miedos al futuro.
ResponderEliminarUn abrazo, Joaquín.
De hecho se genera como bien dices, Albada y eso no es fácil de controlar si dejamos que la misma avance demasiado. Gracias por tus palabras que siempre enriquecen mis posts.
EliminarUn cálido abrazo y feliz semana, amiga.
Buen día Joaquín.
ResponderEliminarBuenas tardes, Teresa... Un placer verte por aquí. Besos...
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