Mi voz puede ser la de un ruiseñor
las cuerdas vocales
su tono más tierno y dulce
- mermelada de arándonos-
balada de timbales,
tenor, soprano o barítono
así nos arrullaríamos abrazados,
entrecruzados y jugando como niños.
Veríamos cada día nuestro amor, germinar
como si fuese la cosecha de trigo...
... el pan recién horneado
y como el halo del fuego
nuestro cuerpo, nuestro amor;
nuestros mimos serían siempre cada día
de diversa orientación y entrega
como la lava que abrasa enardecida
el epicentro de una sinfonía viva.
Copyright: Quino.
Imagen de la red.
Comentarios
Publicar un comentario
SI CREES QUE EL AMOR, DELIRIO Y GOZO DEL ESPÍRITU, SON CARAS DE LA MISMA MONEDA... NO LO DUDES, PASA Y SI NO RECRÉATE. PUEDE QUE EN EL CANTO ESTÉ LA SOLUCIÓN.